Luego de revisar las currículas de estudio de varias instituciones educativas, el resultado es completamente desolador: en un número preocupantemente elevado de casos, la supuesta asignatura de “Informática o computación” consiste ni más ni menos en un cursos para enseñar a manejar el Office de Microsoft, el Word, el Excel y el PowerPoint, impartidos además por un profesorado habitualmente carente de la cualificación necesaria para impartir la asignatura, y que en gran medida por ello prefieren apoyarse en resúmenes preparados como “cursillos puntuales” preparados sin una base pedagógica necesaria. ¿Qué ocurriría si la asignatura de Matemáticas fuese impartida por alguien que ha recibido “un cursillo de matemáticas mediante el uso de la calculadora Casio”, y en lugar de intentar enseñar a los educandos los fundamentos y principios de la matemática, les enseñase únicamente a teclear operaciones de una forma determinada, que puede cambiar en al siguiente versión?.
No se trata de enseñar a los estudiantes otro sistema operativo como Linux en lugar de Windows. Se trata de saber lo que de verdad está detrás del nombre de la asignatura: cómo funciona una máquina, cómo entenderse con ella, cómo extraerle un valor, y cómo hacerlo, además, de una manera completamente independiente a la versión de sistema operativo o los programas que tenga a bien tener instalados. Así lograr que la Tecnología de Información y Comunicación TIC se convierta en una herramienta de apoyo en la vida diaria de cada ser humano.
Enseñar a los estudiantes que la “Informática o computación” consiste en utilizar Windows y Office, es crear una visión completamente parcializada de la realidad, a sabiendas que existen otras herramientas que permiten realizar el mismo trabajo de forma más eficiente y de adquisición libre y/o ha costos bajos. Por lo que es necesaria que las asignaturas de informática y computación sean cubiertas por profesionales especializados, que optimicen a la Tecnología de Información y Comunicación TICs como herramienta pedagógica del aula.
Si usted es docente o padre de familia haga la prueba: obtén la curricula de la asignatura de Informática o computación y revísalo con cuidado y se constatará que existe un sesgo muy peligroso hacia el uso de un solo producto o marca en especial. Por lo que nuestro interés son los estudiantes, y de entender que la vía que se está siguiendo en gran mayoría las instituciones educativas en compartir la asignatura de informática o computación de èsta manera, está basada en unos peligrosísimos intereses comerciales y mentiras de las empresas transnacionales.